No mês de janeiro aquí pelo Agrupamento são bem populares as Cartas aos Reyes Magos que se produzem no âmbito da disciplina de Espanhol.
De todas as produções interessantes e criativas que recebemos, deixamos algumas que tocaram o nosso coração pela magnificência do seu teor.
Macedo, 5 de enero de 2023
Queridos Reyes Magos,
Os escribo desde Portugal. Estoy aprendiendo vuestro idioma con la ayuda de mi profesora.
Este año tengo un deseo muy especial... Solo quiero pediros una cosa: quiero que vuelva mi amigo Simón. ¡Se fue al cielo demasiado pronto y le echo mucho de menos. Mi compañero nos ha dejado y mi visión del mundo ha cambiado doce veces en un momento... Aún no soy capaz de comprender como unas aguas dulces y tranquilas, pueden volverse tan revueltas y ser, de repente, tan amargas…!
Hablando con mis padres comprendí que, cuando yo abro los regalos ellos son inmensamente felices al ver mi reacción. Pero este año vosotros no seréis tan generosos con los papás de Simón... Ellos no podrán compartir esa felicidad con su hijito porque ya no está y mi pérdida no es nada comparada con la suya. Esta pérdida inesperada ha venido como un rayo, destruyendo todo a su alrededor...
Es invierno y los días son más pequeños, pero el dolor de no tener a Simón entre nosotros es más grande a cada amanecer.
Soy consciente de que no me lo podéis devolver, así que os pido que le hagáis llegar mi mensaje allá dónde esté: ¡todos los días son buenos para recordarte; te prometo crecer rápido, no identificarme con géneros y crecer sin límites de ningún tipo. Mi mente permanecerá libre como mi corazón!
Me despido de vosotros y os doy las gracias por vuestra atención y vuestro cariño,
Mariana.
¡Nos vemos el año que viene!
Mariana Lopes, 12.º B
¡Hola queridos reyes!
Me llamo Francisca y vivo por detrás de las montañas, en una región por gran parte del país olvidada, donde hay muchos viejitos y pocos jovencitos.
Os escribo un año más, quizás ni os llegue mi carta… Como ya cumplí 18 años y tengo que pagar para todo y más no sé qué, el cartero verá mi nombre y dirá “ No, no, esta ya tiene que pagar los costes de envío, se queda aquí.”, pero como aun me siento como una niña y he sido buena, os pediré unas cositas.
No os pediré juguetes como cuando era niña de verdad, os pediré algo más especial y difícil de conseguir.
Yo sé que aún sólo tengo 18 año, pero mis rodillas y espalda creo que no saben contar y creen que tengo 81 y estas lastimadas, hacen ruido como una puerta vieja y lo peor es que ¡me duelen! por eso os pido unas nuevas, no os será difícil eso, ¿o sí?; una dieta que me haga adelgazar rápidamente sin tener que dejar de comer y sin hacer ejercicio, también caería bien. Es que la comida me llama y yo como soy una niña buena no le puedo decir que no, y tampoco ignorarla y ejercicio no puedo hacer por mi problema de espalda, rodillas y el otro que nadie sabe, pero seguro que vosotros sí.
Bueno, no me quejo… seguro hay personas peores que yo, ¿sabéis? intento valorar lo bueno y olvidar lo malo.
Deseo que toda la gente sonreía y sea feliz como yo cuando jugaba con mis juguetes y encontraba en los brazos de mi mamá todo lo que necesitaba, sin tener que preocuparme con eso de pagar cuentas al final del mes.
Esto no es para mí, pero por favor regalad un poquito de salud a mi primita de solo 4 meses que está muy malita en el hospital. Tengo ganas de invadir el hospital e ir a verla aunque sabiendo que me van a expulsar por hacerlo, pues nadie sin ser su mamá puede entrar. Una Barbie, sin pelo para que se parezca más a ella, o hasta incluso un coche amarillo también la haría feliz.
Ahora os pediré unas cosas para mi querido país. Perdón pediros cosas tan complicadas como las que voy a pediros ahora ¡de verdad es casi imposible, lo sé!
Os pido que los políticos de mi país dejen de pasear las zapatillas, de sonreír para las teles, de discutir entre ellos y de tirarse los trastos unos a los otros y que se pongan a trabajar en sus lujosos despachos ¡ya basta de vacaciones!
También sería muy bueno que se solucionara el problema de las listas de espera en la salud pública. Es que las personas mueren y solo después llega la cita para el médico. ¡Esta situación está peor que mis rodillas de 81 años!
Hay mucho más que pedir para estos 88,889 km de área de tierra que es mi país, pero hasta me avergüenzo de decirlo.
Bueno, sé que ya os pedí mucha cosa pero falta una, esta es sencilla, pero cara. Es que ya saqué el carné de conducir, ¡Pero no conduzco! Me estafaron a cien… ¡Necesito un coche… Por favor!
¡Besitos, besitos, me quedo esperando mis regalitos!
Ana Francisca, 12.°B
Carta a los Reyes Magos
25 de diciembre de 2022,
Macedo de Cavaleiros
Queridos Reyes Magos,
¡Espero que nos conozcáis bien!
Yo, mi familia, amigos y profesores estamos bien y eso me hace feliz.
Esta fase del año en la que os escribo siempre es apasionante, ya que reflexiono sobre el último año. Pero hoy, 25 de diciembre, me puse mi suéter navideño como mis hermanas, me senté en la mesa de la cocina, junto a la chimenea, con una hoja de papel y un bolígrafo para escribiros.
A mi alrededor veo a mis hermanas riéndose a carcajadas con sus juegos; mis abuelos sentados en sus sillones muy atentos a todos y mi padre y mi madre con sus gorros navideños susurrando: “İqué suerte tenemos por tener esta familia!”. Desde lejos me conmovió y esta imagen la guardaré para siempre en mi corazón. Sentí, en ese momento, el verdadero espíritu de la temporada navideña y decidí compartir con vosotros lo más importante de la vida: mi familia unida.
El motivo de mi carta navideña es para decir gracias por todo lo bueno que tengo en la vida y también por todas las lecciones que aprendí.
Pero… si pensáis que este año no iba a pedir nada, ¡estáis muy engañados! Para este ano quiero una buena dosis de… humor y ¡mucha paciencia! Porque si os parece que en casa todo es sencillo y divertido, es porque nunca habéis decidido a venir a asomar por nuestra ventana las noches que jugamos al UNO o al Monopolio porque a todos nos cuesta mucho perder y, como si fuera poco, ¡el mal genio es dominante!
!!!!Ahhhhh!!!! Por no hablar de nuestra actividad navideña favorita, que es hacer galletas navideñas en familia e incluso por eso quiero pedir más tranquilidad en las peleas por la harina y la elección de las formas de las galletas.
Bueno, queridos Reyes Magos, ¡no todo es sencillo cuando se tienen hermanas! ¡JAJAJAJAJA!
Pero, en realidad, mi pedido es que estas bromas y molestias ¡duren para siempre!
Antes de terminar, quiero pedir con mucha fuerza y a las estrellas más brillantes una familia unida, ¡para todas las personas del mundo!
No puedo imaginar mi vida sin mi familia… Y como decía mi bisabuela Ana (que ahora es una estrella…) “las familias no se quieren perfectas, sino que unidas”.
Melchor, Baltasar y Gaspar, para mí sois un ejemplo de amor y de compartir, así que: ¡gracias!
¡Me despido con un fuerte abrazo, amor y fe!
Hasta pronto.
Bruna Afonso, 10.ºB
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